Después de tres sesiones casi tengo terminado el hadajuban. Ese día fui a clase en kimono, porque después había quedado con una amiga, a mi profesora nunca dejo de sorprenderla.
Tengo que hacerme un delantal para conducir, porque hacerlo con viento, cosa que siempre hace en Kyoto, es muy molesto. Incluso con la pinza se levanta mucho la parte del suso.