La página web está eternamente en japonés y la inscripción también lo está, una vez allí tampoco nadie sabía inglés, así que puede ser un problema si no se sabe el idioma.
El taller no estaba muy lejos de donde vivo, muy cerca del Palacio Imperial. La maestra y su ayudante eran encantadoras, y el director también muy simpático. La chica me preguntó si estudiaba ceremonia del té, pues yo estaba sentada en seiza (también existe la posibilidad de hacer el curso sentada en una silla), así que el expliqué mi afición a los kimonos. Como la mayoría de japoneses se llevó una grata sorpresa al descubrir mi interés.
En el curso se pueden hacer diversos accesorios: obijime (5.000 yen), accesorio para el pelo (2.500 yen), pulsera (2.000 yen) y colgante para el móvil (2.000 yen). El precio incluye todos los materiales necesarios.
De varios obijimes empezados escogí el que quería hacer. Ya están comenzados porque la preparación de los hilos es laboriosa. Entonces la profesora preparó cada madeja de hilo enrollándola en las bobinas. Estas tienen un peso dentro para que el hilo quede tenso.
Que pasciencia para todas estas manualidades. pero todo sea para hacer lo correcto para la vestimenta.