Kimonos nuevos
El primer punto por el cual se juzga un kimono, es por la cantidad de trabajo que conlleva. Técnicas como yukitsumugi, miyako o jofu, consisten en una forma determinada de hilar las telas, y son teñidas antes de tejerlas. Cómo podéis imaginar, el proceso es largo y puede durar unos 3 meses para completar una sola tela para un kimono, llamado tan. La técnica empleada por el artesano conlleva un arduo aprendizaje que dura años. Por lo tanto, el precio del kimono tiene que ser el sueldo de 3 meses del artesano, aproximadamente sería 10.000€. A esto hay que añadir, el coste de dos distribuidores y el margen de la tienda donde se vende. Todo esto infla el precio excesivamente.
Durante la burbuja económica (1868-1991), muchas tiendas subieron el precio de los kimonos hasta 10 veces de su coste real. Como pasó en nuestro país, la mayoría de gente pensaba que esa burbuja no acabaría. Por lo que estaban dispuestos a comprar a altos precios. Cuando la brubuja estalló, muchas tiendas tuvieron que bajar los precios, y muchas otras quebraron.
Hoy en día, debido a la mecanización de proceso y a la producción de las prendas en el extranjero, la clase media y baja de los kimonos están producidas en parte en China, y cosidas en Vietnam. Como la calidad no es la misma sus precios son menores. Actualmente, un sello garantiza la calidad de la seda japonesa.
El poliéster ha sido una gran revolución en su fabricación. Sus precios son muy competitivos y tiene muchas ventajas respecto a la seda (su fácil lavado y cuidado). Para kimonos de uso diario es ideal. Incluso los diseñadores mas vanguardistas usan este material para la confección de sus productos. Estas prendas suelen costar entre 100-300€, no llega a los precios desorbitados de la seda. En nuestra tienda encontrarás una gran variedad de kimonos de calidad a precios competitivos.
Kimonos vintage
El factor principal es la calidad del kimono y su estado de conservación (manchas, descosidos, roturas, etc). El tamaño también es importante, muchas prendas antiguas son demasiado pequeñas para la gente actual.
El precio también varía si se quiere usar la seda para hacer otro tipo de artesanía. Es muy popular en Japón hacerles a las muñecas kimonos con esas sedas, ya que son de gran calidad, y a diferencia de seda nueva su precio es mucho menor. Sobretodo los tipos chirimen y kinsha son muy apreciados por su gran calidad.
Otras personas que compran los kimonos son coleccionistas. Hay muchos coleccionistas en Japón como en el extranjero, y el precio de lo que compran es determinado por el estado y el tipo de motivo (si la decoración es común o una pieza única), al igual que otro tipo de colecciones.
Estos últimos años el mercado de segunda mano se está viendo colapsado por una gran demanda. Estamos viendo una subida de precios de todos los productos, que antes se pagaban a precios irrisorios, ahora son mucho más valorados y se prevé que sigan aumentando los próximos años.